Al nuevo Decreto de Emergencia ante déficit hídrico se incluyen 3 provincias más del Cusco.
El pasado 19 de septiembre de se publicó el Decreto Supremo N° 104-2023-pcm, que declara el Estado de Emergencia en varios distritos de algunas provincias de los departamentos de Áncash, Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Cusco, Huancavelica, Huánuco, Ica, Junín, La Libertad, Lima, Pasco, Puno y Tacna, por peligro inminente ante déficit hídrico como consecuencia del posible Fenómeno El Niño 2023-2024.
Este año se hizo la misma declaración el pasado mes de junio, en la actual publicación se ha ampliado algunas provincias más dentro del departamento de Cusco, llegando a ser 13 las zonas afectadas, además de otras 5 en la región de Apurímac. Esto muestra que la situación podría ser más grave de lo precedido anteriormente y que todavía más zonas podrían verse damnificadas por esta situación meteorológica.
Las provincias de los departamentos de Cusco y Apurímac incluidas son las siguientes:
- Cusco: Acomayo, Anta, Calca, Canas, Canchis, Chumbivilcas, Cusco, Espinar, La Convención, Paruro, Paucartambo, Quispicanchi, Urubamba.
- Apurímac: Abancay, Andahuaylas, Chincheros, Cotabambas, Grau.
Monitoreo de las fuentes de agua, calidad y cantidad, en el distrito de Ccapi, Paruro, como parte del proyecto implementado por el CEDEP Ayllu.
El decreto se basa en las investigaciones realizadas por INDECI, las cuales señalan que la presencia de déficit hídrico tendría como consecuencia efectos negativos en la salud de la población local, en áreas de cultivo y la población pecuaria. De esta manera, las personas más afectadas serían los habitantes de las zonas rurales y agrícolas. Éstas no sólo tendrían una falta de agua para consumo, sino también para las actividades económicas como la agricultura y ganadería, afectando una buena parte de la siembra de alimentos, el forraje y pastos cultivados para alimentar a los ganados y animales menores.
Respecto a la forma en la que se va a enfrentar esta situación, se especifica que se deberán ejecutar medidas y acciones de excepción, inmediatas y necesarias, para la reducción del Muy Alto Riesgo existente, así como de respuesta y rehabilitación que mitiguen los efectos de la sequía. Estas medidas deberán ser ejecutadas en el plazo de sesenta (60) días por los Gobiernos Regionales y los Gobiernos Locales, juntamente con la coordinación técnica y seguimiento del INDECI y la participación del Ministerio de Salud, del Ministerio de Educación, Vivienda, Construcción y Saneamiento, Desarrollo Agrario y Riego, Desarrollo e Inclusión Social, Interior, Defensa, y demás instituciones públicas y privadas involucradas.
Esta colaboración entre instituciones responde a la aclaración que se hace en el presente decreto, indicando que son insuficientes los recursos de los Gobiernos Locales para luchar contra el déficit hídrico. El informe señala que éstos no disponen de la capacidad de respuesta técnica y operativa suficiente para atender el peligro, y contempla como necesaria la intervención de las entidades del Gobierno Nacional.
Con este decreto de emergencia, los gobiernos locales podrán hacer contrataciones directas de bienes y servicios, así como la compra de kits veterinarios, alimentos para los ganados, disponer de acciones para asegurar el abastecimiento, disponibilidad de agua, control y medición de canales de riego, entre otras medidas, según la ministra de Agricultura Jennifer Contreras Álvarez.
Ante esta situación, algunos gobernadores piden que se declare toda su región en estado de emergencia, como es el caso de Tacna, sin embargo, ¿será suficiente con solo ampliar por segunda vez el estado de emergencia?
